Quizás se crea que esto no sea más que un trabalenguas (o tragalenguas, así lo entendía yo cuando era niño) pero es que en realidad los intereses sociales se sobreponen por encima de los intereses particulares. Y no me refiero a lo que cotidianamente nos atormentan haciéndonos sentir culpable de lo que el Estado gubernamental nos otorga a través de diferentes opciones y que nos corresponde por derecho. Me refiero a la necesidad de hacer patria dentro de los parámetros legales establecidos tanto nacional como internacionalmente, y es que para nosotros no debe existir mayor interés social que mantener un territorio libre de toda artimañas y de alimañas que nos genere traumas y distorsiones de la realidad física como neurológica.
El bienestar (Bien-estar) es para que logramos el desarrollo en todo tipo de sentido y bajo la mejor circunstancia. Pero es que estamos bajo un ataque neurológico nunca antes visto, debido a que los patrones o cuadros empleados en otros países se han logrado sin el mayor de los esfuerzos y obteniendo el mejor de los resultados. Por ejemplo en la capital de Túnez a principio de este año hubo manifestaciones violentas por las nuevas políticas del gobierno y el aumento del 9% en la inflación (por solo el 9%) y en la actualidad las nuevas políticas impuestas en Argentina, a puesto de cabeza a más de uno por tan solo pasar de 20 pesos por dólar a 24 pesos por dólar... que tal.
Aquí en Venezuela a pesar de todo lo que ha sucedido, los que están de cabeza son los autores de estos tipos de planes pues no han entendido que el venezolano no es motivado a actuar de forma tan autómata ante los procesos sociales que nos han estado imponiendo en los últimos tres años (aunque muchos se dejan influenciar por las redes disociales) creando así un descompón entre los que tratan de socavar nuestro interés entre lo social y lo particular.
Por ahora seguiremos estando a la espera del próximo ataque neuro-psicológico mezclado con más impulso de actos violentos llevados por lo mensajes de desinformación intentando ahondar en el alma de cada uno de los habitantes del país.
Por eso Pienso y Luego Hablo...
El bienestar (Bien-estar) es para que logramos el desarrollo en todo tipo de sentido y bajo la mejor circunstancia. Pero es que estamos bajo un ataque neurológico nunca antes visto, debido a que los patrones o cuadros empleados en otros países se han logrado sin el mayor de los esfuerzos y obteniendo el mejor de los resultados. Por ejemplo en la capital de Túnez a principio de este año hubo manifestaciones violentas por las nuevas políticas del gobierno y el aumento del 9% en la inflación (por solo el 9%) y en la actualidad las nuevas políticas impuestas en Argentina, a puesto de cabeza a más de uno por tan solo pasar de 20 pesos por dólar a 24 pesos por dólar... que tal.
Aquí en Venezuela a pesar de todo lo que ha sucedido, los que están de cabeza son los autores de estos tipos de planes pues no han entendido que el venezolano no es motivado a actuar de forma tan autómata ante los procesos sociales que nos han estado imponiendo en los últimos tres años (aunque muchos se dejan influenciar por las redes disociales) creando así un descompón entre los que tratan de socavar nuestro interés entre lo social y lo particular.
Por ahora seguiremos estando a la espera del próximo ataque neuro-psicológico mezclado con más impulso de actos violentos llevados por lo mensajes de desinformación intentando ahondar en el alma de cada uno de los habitantes del país.
Por eso Pienso y Luego Hablo...